Guanajuato lleva por sobrenombre“lugar de las ranas”, se debe a que para los primeros habitantes de la ciudad, la forma de su terreno montañoso era similar a la de una rana. A esta región se le conoce como el Bajío, o el corazón de México.
Fundada en 1559, Guanajuato es una antigua ciudad hogar de la mina la Valenciana. La plata fue descubierta por primera vez en Guanajuato a mediados del siglo XVII. La Valenciana fue explorada un siglo más tarde y se convirtió rápidamente en una de las minas más ricas y productivas del mundo. El Templo de San Cayetano, que se encuentra a un lado del yacimiento, se erigió como monumento a la abundancia y las riquezas extraídas de la mina.
El centro histórico de Guanajuato tiene un distintivo sabor europeo, con cientos de callejones empedrados que suben y bajan por la ladera. Las arboladas plazas están llenas de cafés al aire libre, museos, teatros, mercados y monumentos históricos. Los edificios de la ciudad son un excelente ejemplo de la arquitectura Colonial de estilo neoclásico y barroco. Una red de túneles subterráneos corre por debajo de la ciudad para ayudar a controlar el flujo del tráfico, manejar por las calles de Guanajuato constituye un desafío para los automovilistas. El Río Guanajuato solía correr bajo la ciudad y con frecuencia era la causa de inundaciones en las calles, especialmente durante la temporada de lluvias. A mediados del siglo 20, ingenieros construyeron una represa para redirigir el río a cavernas subterráneas y así paliar las inundaciones. Más adelante esa red de túneles subterráneos fue transformada en vialidades para dar cabida al tráfico de la ciudad.
Las vialidades están pavimentadas con adoquines y bien iluminadas, cuentan con intersecciones, ejes transversales, e incluso sendas para peatones. La organización de los túneles es similar a del sistema de metro de una ciudad. De hecho, varias rutas locales de autobuses públicos corren bajo tierra.
Hay escaleras de piedra que conducen desde el nivel de la calle hasta los túneles subterráneos, ofreciendo a los peatones una alternativa al laberinto de callejones que llegan al centro histórico. Incluso si no tenemos planeado conducir durante nuestra visita, vale la pena visitar este mundo.
Guanajuato es conocida como la cuna de la independencia de Mexico, esta ciudad es una importante parada a lo largo de la Ruta de la Independencia, la cual también pasa por Dolores Hidalgo y San Miguel de Allende. Recorre la Alhóndiga de Granaditas, un edificio y monumento histórico ubicado en el centro de la ciudad, y el sitio donde tuvo lugar la primera gran victoria sobre los españoles en 1810.
Alhóndiga significa “almacén de granos” o mercado, ya que el edificio albergaba originalmente un gran almacén de granos y semillas, o granero. En 1810, la Alhóndiga era una fortaleza para las tropas españolas y líderes leales al régimen y fue el sitio de la primera gran victoria sobre los españoles. Bajo el mando de Miguel Hidalgo, un minero local con el nombre de José de los Reyes Martínez, apodado El Pípila, se ató una gran piedra sobre la espalda para desviar las balas y abrió una brecha en las defensas españolas quemando las puertas de la fortaleza.
Las tropas de Hidalgo resultaron victoriosas por lo que se erigió una estatua y monumento en honor de El Pípila en una colina con vista a Guanajuato. Podemos llegar hasta el monumento mediante un funicular que sube a la colina desde el Jardín de la Unión, o plaza central. Las operaciones mineras propiedad de los españoles trajeron una gran prosperidad a la región; por lo tanto, el movimiento de la Independencia de México continuó enfrentando una importante oposición en el Guanajuato colonial. Los líderes revolucionarios Hidalgo, Allende, Aldama y Jiménez fueron finalmente capturados y decapitados, sus cabezas fueron colgadas de las cuatro esquinas de la Alhóndiga de Granaditas.
En 1864, el edificio fue convertido en cárcel, y en 1967, se convirtió en el Museo Regional de Guanajuato. Actualmente alberga exposiciones sobre la historia colonial, artefactos precolombinos y artesanías regionales. Los murales en la escalinata, creados por José Chávez Morado, representan la historia de la época colonial y el papel que la región desempeñó en la lucha por la Independencia de México. A un lado, se encuentra una gran plaza con una amplia escalinata que es utilizada como auditorio al aire libre para acoger actuaciones en vivo durante el Festival Internacional Cervantino de la ciudad, el acontecimiento más importante del año para el turismo de Guanajuato. La Alhóndiga de Granaditas (Mendizábal 6, esquina con 28 de Septiembre y 5 de Mayo), permanece cerrada los lunes
Guanajuato es una ciudad de leyendas y de lugares legendarios. Uno de los más conocidos es el famoso Callejón del Beso, un lugar tan estrecho en el que las parejas pueden besarse desde balcones opuestos. y la leyenda local dice que la Llorona deambula por los túneles de Guanajuato. No podemos dejar de participar en una callejoneada, o serenata a pie, dirigida por músicos estudiantes que, acompañados con guitarras, dan serenata a los ahí presentes y cuentan historias locales.
La ciudad alberga anualmente al Festival Internacional Cervantino, un evento de artes escénicas nombrado en honor de Miguel de Cervantes Saavedra, autor de Don Quijote de La Mancha. También encontraremos un museo dedicado al Quijote, estatuas de él y de su fiel escudero Sancho Panza, en la Plaza Allende, justo afuera del Teatro Cervantes.
Podrás conocer la casa del famoso muralista mexicano Diego Rivera, nacido en este estado, que ha sido convertida en un excelente museo. La ciudad es también hogar de una gran población de estudiantes, muchos de los cuales asisten a la Universidad de Guanajuato, una de las universidades más antiguas del estado.
Guanajuato es un lugar ideal para degustar la cocina regional del Bajío. Entre los platillos locales favoritos se encuentran las enchiladas mineras (tortillas rellenas de carne, frijoles o queso y cubiertas con una salsa de chile guajillo y chile ancho) y las pacholas guanajuatenses (carne molida con especias). También puedes disfrutar de increíbles vistas desde las alturas de la ciudad y las montañas y los valles circundantes del estado de Guanajuato mientras te deslizas en un ala delta o viajas a bordo de la canasta de un globo aerostático