En la punta de la península de Baja California se encuentra una región que guarda una interesante dualidad: Los Cabos. ¿Cuál es esa dicotomía? A este destino turístico lo distinguen dos personalidades que son dramáticamente diferentes. Por un lado, el tranquilo San José del Cabo mantiene la apariencia y el aire de un auténtico pueblo mexicano. Calles empedradas, restaurantes íntimos y boutiques son parte de su encanto. Por otro lado, el estridente Cabo San Lucas, ubicado al otro lado del «Corredor», es el lugar perfecto para la fiesta, con animados bares y glamorosos centros comerciales cercanos a la marina.
A Los Cabos se le conoce como «El fin de la tierra» ya que es la última porción de terreno de la Península de Baja California, este vasto y generoso territorio que comparten México y Estados Unidos. Es precisamente por su proximidad con este país que Los Cabos denota una gran influencia del estilo de vida estadounidense, en términos de servicios urbanos y centros comerciales. Sin embargo, se mantiene ese encanto del pueblo donde se unen el mar de Cortés y las montañas.
Cabo San Lucas mismo ofrece un área de Marina muy activa, un pueblo con muchas tiendas, restaurantes, algunas atracciones turísticas como la Iglesia San Lucas y la plaza de armas y algunas playas, como la muy popular Playa Médano que queda cerca del centro de Cabo
Principales atractivos:
- Pesca deportiva
- Avistamiento de ballenas
- Gastronomía en especial pescados y mariscos
- Golf
- Playa
- El Arco
- La Marina CSL
- Iglesia San Lucas y la plaza principal
- Playa Medano
- Tour de Tirolesa
- Buceo